"Necesito una pareja para ser feliz"
By Por Dr. Margaret PaulDecember 31, 2006
Si esperas a que aparezca alguien para hacerte feliz, probablemente te quedarás estancado/a siendo infeliz. Descubre la importancia de hacerte feliz a ti mismo/a ahora y cómo empezar a hacerlo antes de que conozcas a tu pareja.
El problema es que solemos atraer a personas que se encuentran a nuestro mismo nivel de sufrimiento y a nuestro mismo nivel de sanación. Como Adrianne nunca aprendió a tratarse a sí misma con cariño, solía conocer a hombres que nunca se habían tratado a si mismos con cariño. Y cuando por fin encontró a un hombre que se resposabilizaba de su propio bienestar emocional, la relación duró poco, porque él perdió pronto interés en una mujer que quería hacerle feliz.
Cuando Adrianne y yo empezamos a trabajar juntas, me di cuenta de que había dedicado toda su vida a responsabilizarse emocionalmente por los demás: sus padres, sus hijos y sus parejas. Según su sistema de creencias, se suponía que ella tenía que hacer feliz a los demás y los demás tenían que hacerle feliz a ella. Pero no parecía que eso funcionase, pues ella nunca se sentía feliz.
Adrianne también creía que cuidar de sí misma significaba ser una egoísta, en lugar de un acto de auto-responsabilidad. Temía que si hacía lo que le apetecía, y no lo que los demás querían que hiciese, la gente de su alrededor se enfadaría con ella. Conforme fuimos trabajando juntas, Adrianne vio que su infelicidad no yacía en el hecho de que no tuviera pareja, sino en que no se estaba responsabilizando de si misma. No estaba hablando por si misma ni en el trabajo ni con los hombres con los que salía, por el contrario, permitía que los demás la pisotearan. Se dio cuenta de que al intentar constantemente controlar que los demás no se enfadaran con ella, se estaba abandonando a sí misma. Era el auto-abandono lo que le estaba provocando tanto dolor y sentimiento de soledad.
Conforme Adrianne se fue tratando a sí misma con más cariño, empezó a sentirse mejor. Pero aún sentía que había un vacío dentro de ella. Quería una pareja para tener compañía, para salir a cenar, para ir al cine, para viajar y para jugar.
"Adrienne," le dije, "Entiendo que te encantaría tener una pareja con el que hacer cosas. Pero ¿por qué no puedes hacer estas cosas con amigos? No estoy diciendo que dejes de estar abierta a encontrar una pareja, pero mientras tanto, ¿por qué no haces estas cosas con amigos?"
"No tengo amigos," contestó. "He estado tan preocupada por buscar una pareja que no he dedicado ningún tiempo a desarrollar ninguna amistad. Cuando no salgo con nadie suelo aislarme."
"¿Cómo te sientes cuando te aíslas?"
"Me siento triste y sola. Por eso creo que necesito tener pareja para ser feliz. Simplemente nunca se me ocurrió que podría hacer cosas divertidas con amigos."
"Como ves esta es una de las cosas más importantes que has descuidado de ti misma. Has estado permitiéndote sentirte triste y sola en lugar de cuidar de ti misma desarrollando amistades. ¿Estarías dispuesta a ir a sitios donde puedas encontrar a gente con la que entablar amistad?"
Adrienne estuvo de acuerdo en que podría hacerlo. La semana siguiente, durante nuestra sesión telefónica, la oí mucho mejor. Había conocido a una mujer interesante en el partido de fútbol de su hija y habían quedado para comer.
En cuanto Adrianne se dedicó a desarrollar amistades más profundas, dejó de sentirse triste y sola. Siendo una mujer más feliz, empezó a conocer a hombres más felices. La última vez que hablé con ella, estaba saliendo con hombres que le gustaban de verdad, mantenía sus amistades y no estaba haciendo a los hombres responsables de su felicidad.
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Your ego - your wounded self - is a child who is acting out in ways that are harmful to you. Your job as a loving Adult is to love but not to indulge this wounded child. Your job is to set solid limits on what you think, how you act, what you put into your body, what you say to others. If you want to stay in peace and joy, you cannot indulge your ego wounded self.
By Dr. Margaret Paul